El intraspasable abismo
que rige esta sociedad
carece de humanidad
tan solo por egoísmo.
La vida es muy testaruda
con el pobre que se esfuerza
porque le impone a la fuerza
gente rica, necia y ruda.
Mas no falta quien “le ayuda
a salir del ostracismo”,
el mezquino en su cinismo
le dice: ¡vente pa’ acá!
porque de por medio está
el intraspasable abismo.
Abismo que hace a la gente
soñar con su propio edén
y a que se divida en
menesterosa y pudiente.
Se mantiene aún vigente
nuestro vals “Mendicidad”,
bastante locuacidad
hay en muchos y en conciencia
no es más que la indiferencia
que rige esta sociedad.
Ahora juran los doctores
como jura el usurero
que el que no tiene dinero
se muere con sus dolores.
Peinan canas los valores
con tanta modernidad
para más comodidad
cada cual su bien procura
por eso también el cura
carece de humanidad.
De moda está Leviatán
lo mismo que Belcebú
y no solo en el Perú,
Indonesia y Pakistán.
Culpa no tiene el Islam
y tampoco el Cristianismo,
las plagas por su realismo
no son nada misteriosas
pues pasan casos y cosas
tan solo por egoísmo.
* planta de la décima “Agro” de Nicomedes Santa Cruz.
© 2007 Luis Bárcena Giménez
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