Vivo feliz con mi esposa


Vivo feliz con mi esposa
capeando viento y marea,
no sé si otros la ven fea
yo la veo muy hermosa.


Mostrándome la pechuga
(la Eva estaba al acecho)
me dijo: Te froto el pecho
con mi crema de lechuga .
En vez de emprender la fuga
le respondí a la tramposa:
- Muy cerca de Santa Rosa
entre Chancay y Cañete
en un viejo “palacete”
vivo feliz con mi esposa.


Ella insistió: ¡Sacolargo
anda, súbete a mi coche
siquiera por esta noche
deja que yo me haga cargo!
Yo le dije casi amargo:
La trampa no me recrea
mi esposa tiene “correa”
y yo sé que me las junta
mas vamos los dos en yunta
capeando viento y marea.


Rápido habló de otro modo:
Escúchame “alma bendita”
conmigo que soy bonita
¡tú puedes hacer de todo!
- Si es por “eso” me acomodo
con mi esposa en la azotea
ella el dinero no emplea
en productos de belleza,
para lo que me interesa
no sé si otros la ven fea.


- ¡No sabes lo que te pierdes
y te golpearás el pecho
porque tú nunca lo has hecho
con una rubia ojos verdes!
- Si la lengua no te muerdes
de ella añadiré una cosa,
cuando en la tarde brumosa
retorno a casa cansado
con su mandil ajustado
yo la veo muy hermosa.


* planta de la décima “Mi abuela parió a mi madre”de Nicomedes Santa Cruz

© 2007 Luis Bárcena Giménez
Share on Google Plus

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.